¿Qué complicaciones percibió la compañía ante la pandemia de COVID-19?
D.E: Sufrimos una parálisis casi absoluta en todas las áreas de producción, junto con la incertidumbre de no saber cuándo se van a poder reanudar las cosas y en dónde. Nosotros hemos estado muy activos en el área de desarrollo, creación y producción de podcasts, ya que no hay necesidad de juntar grandes equipos de producción. Afortunadamente, lo que estamos viendo es una reanudación de actividades en la industria en general, pero con cierta localización. Tenemos la fortuna en Exile de tener operaciones y proyectos en México, España, Colombia y USA. Esto nos va a permitir tener ciertas producciones en marcha, otras con complicaciones y unas más que no podrán realizarse. Las dos producciones que teníamos paradas pre-pandemia pudimos volver a iniciarlas, y lo que estamos aprendiendo con estos dos casos nos ayudará fuertemente a la hora de retomar las demás.
A.S: Efectivamente es un momento muy raro. Personalmente yo estaba haciendo una serie justo previo a la pandemia y tuvimos que parar todo en México. Eso obligó a que el mundo tuviese que reinventarse y a descubrir nuevos caminos, a entender qué se puede hacer y qué no, no sólo desde el lado de producción sino también a nivel creativo. Ha habido un nivel de reescritura de guiones que ya tenían luz verde y estaban terminadas para iniciar su producción. Creo que esto va a seguir un tiempo y se analizará mucho más qué hacer, ya que tal vez un documental sea más sencillo de producir que cualquier otro tipo de contenido. Todos los esfuerzos que se están haciendo sirven mucho para mitigar, pero nadie puede arriesgarse. Hasta que esto no termine, vamos a tener que seguir siendo más creativos de lo que éramos, y eso va a ser cada vez más difícil.
¿Qué desafíos presenta la incorporación a la compañía en un momento tan particular?
A.S: Es un momento interesante para entrar a una nueva compañía en plena pandemia, porque hay que aprender cosas sobre las que no conocíamos. Yo llevo poco más de 20 años produciendo y la verdad es que nunca me había enfrentado a un problema de este tamaño. Eso va a ser un reto grande. Sin embargo, la verdad es que estoy muy emocionado por la cantidad y la diversidad de contenidos que hay en puerta. Ahora me toca un poco tratar de identificar qué proyectos son más viables de hacer en este momento, no sólo en términos económicos, sino también de salubridad y sacrificio.
¿Cómo describirían el auge del contenido unscripted en América Latina?
D.E: La verdad que el contenido unscripted está en un momento increíble, que derivó de la tradición del mercado de Estados Unidos con las docuseries, y creo que eso está empezando a permear a las producciones en otros idiomas. Ahora está surgiendo la oportunidad para creadores de otras regiones de generar docuseries Premium, que atraen fuertemente la atención de las audiencias. Sí creo que tiene que ver la habilidad de estas grandes plataformas de streaming de agregar sin plantear audiencias masivas, por lo cual crea nichos que son lo suficientemente grandes para desarrollar contenidos que en números será muy exitoso.
A.S: Es sorprendente ver cómo el documental siempre fue un género muy castigado, y al abrirse estos networks, la opción de una miniserie documental genera un boom que es rarísimo de explicar, salvo algunas excepciones. Sin embargo, creo que esto está bien ligado con los costos de producción. Al haber una demanda enorme de contenido, el costo para producir una ficción es mucho mayor al del documental, por lo que quizás eso sea lo que haga la diferencia.
¿De qué manera se puede generar contenido scripted que atraiga la atención de las audiencias entre tanta oferta?
D.E: Hay que crear contenidos que no necesariamente se piensen para todas las audiencias. Se puede crear un contenido específico para audiencias particulares, y que a su vez haya suficiente de esa audiencia para que valga la pena la producción de ese contenido. Cuando esas producciones se crean con alta calidad, tienen la posibilidad de romper con ese nicho hacia una audiencia mucho más grande. Para nosotros, pensar en una audiencia siempre es lo más importante. También hay un desafío con el que se encuentra uno como creativo ante la multiplicidad de opciones que tiene un suscriptor hoy en día. Creo que el Premium IP tiene un reconocimiento con una audiencia relevante y eso es algo que tiene un gran valor a la hora de romper con los esquemas de lo que se maneja en el mercado.
¿Bajo qué estrategias están trabajando para impulsar la marca de Exile Content?
D.E: Queremos ser la casa de quienes consideramos como los mejores creadores de la región. Eso es una prioridad estratégica sobre la cual estamos trabajando agresivamente. La segunda parte está enfocada en la persecución del mejor IP y por otro lado los temas de representación y quién puede contar qué historia en la región y cómo se están transformando estas oportunidades pasaron a ser un tema fundamental.
A.S: Creo que ya no vamos a estar atados a lo que se dicte en torno a la pandemia, sino a la luz verde a los diferentes proyectos. La verdad es que las plataformas y los networks están todavía un poco preocupadas por qué se puede hacer y qué no, ante la cantidad absurda de protocolos. A pesar de ello, creo que estamos listos para reanudar, obviamente con ciertos bemoles, pero básicamente estamos esperando que los networks nos den permiso para que se reanude. Como la mayoría de los proyectos que estábamos por iniciar son nuevos, y no renovaciones, realmente por el momento no dependen del COVID-19 sino de la luz verde de las compañías, ya que son quienes amortizan todos los gastos extras en protocolos que pueden llegar al 10% del gasto total de la producción.
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